El papel del profesor en el desarrollo del niño abarca mucho más que la transmisión de una asignatura, su influencia también abarca el desarrollo cognitivo, emocional y el futuro profesional de los alumnos. Esta influencia se ejerce desde edades tempranas y a lo largo de toda la carrera académica de una persona, donde se va desarrollando la autoestima, la confianza y la seguridad en uno mismo.
Si pensamos por un momento en los profesores de las Escuelas Infantiles, de Educación Infantil y Educación Primaria nos encontramos con profesionales que son otros brazos que calman y contienen en las primeras separaciones del niño con los padres, incluso también son facilitadores para esos padres que les cuesta poder separarse de sus hijos. Suelen ser los primeros en detectar las dificultades (físicas, cognitivas o emocionales) en los niños y dar la voz de alarma cuando es necesario, al igual que son los que desarrollan -dentro de sus funciones- medidas para poder paliar o facilitar que los pequeños puedan seguir evolucionando entre los distintos estadios del desarrollo. Los profesores de estas edades también acompañan a los papás y les indican recomendaciones desde sus puestos de trabajo para hacer un trabajo conjunto en la escuela y en casa (ejemplo sencillo, retirada de pañales).
Esto que podemos ver de forma tan sencilla en los profesores de los niños más pequeños, se va a continuar manteniendo a lo largo de los años pero cambiarán las formas en las que se representa, para adaptarse a las necesidades de los alumnos -sus tiempos psicológicos, sus formas de expresión y maneras de relacionarse- según van creciendo.
Por ello, en todos los tramos de la educación escolar nos encontramos con que el profesor desarrolla un papel fundamental que va más allá de la enseñanza de una materia. Se trata de una figura que va a marcar una gran influencia en la vida del niño, con independencia de la edad, pues puede ser un facilitador del desarrollo, de los sueños y de las capacidades del niño, al igual que puede convertirse en alguien que obture su deseo de saber, su sana curiosidad o su capacidad para crear.
La influencia de un profesor, o de todo el equipo de profesorado, puede determinar cómo un alumno pueda imaginarse su futuro. El lenguaje no verbal -cómo le mire, cómo le trate- y cuánto se entregue un profesor a la enseñanza (si se queda en la materia, o trata lo humano) puede derivar en que alumnos con dificultades se les abra la puerta de las posibilidades, que aquellos que han sido etiquetados como «no vales para nada» sientan que claro que pueden valer para lo que ellos quieran, que puedan creer en sí mismos. Todo esto, por supuesto, está directamente relacionado con la posibilidad de desarrollar una buena autoestima y un buen autoconcepto de uno mismo, de poder ser una persona con mayor seguridad en una misma, de poder tener ideas propias e incluso de saber pedir ayuda.
Y es que, por la contra, para que os fijéis en la importancia del profesor en el desarrollo cognitivo, emocional y el futuro profesional de un niño, nos encontramos con el Efecto Pigmalión y sus consecuencias en el aula. Éste tiene que ver con las expectativas que se ponen sobre una persona y cómo estas expectativas van a filtrar -probablemente, sin ser consciente- todo lo que haga esa persona. En clase podríamos encontrarnos muchos ejemplos. Imaginaros que llega un profesor nuevo y es avisado de que Fulano no hace nada en clase y no para de hablar, ese profesor nuevo ya va a ir con un prejuicio sobre Fulano que puede influenciar en su manera de verle, hablarle, de lo que puede esperar de él e incluso de calificarle. Es decir, la etiqueta que le ha sido puesta a Fulano, otro profesor más la refuerza y Fulano puede acabar preguntándose ¿Soy quien yo creo que soy o soy quien dicen que soy?
Como tantas veces os comparto a lo largo de los artículos o en el Facebook, cada persona es única, cada caso es único, y los profesores tienen el papel maravilloso de poder crear y trabajar con personas únicas, no de intentar crear sujetos que tienen que ser exactamente iguales en su manera de pensar, hablar o brillar. Citando a Albert Einstein «Todos somos genios. Pero si juzgas a un pez por su habilidad de trepar un árbol, vivirá toda su vida creyendo que es estúpido».
Si tu vocación es ser profesor, tienes la opción de estudia la carrera de magisterio con el grado online de educación primaria de la Universidad Internacional de Valencia y ser parte del profesorado que va a marcar la vida de los futuros adultos que tendrán el mundo en sus manos.