El 25 de noviembre es el Día Internacional contra la Violencia de Género, pero todos los días nos enfrentamos a este tragedia que perdura día a día. Os compartimos algunos mitos sobre la violencia de género que es importante conocer para no caer en la ceguera de una sociedad que no siempre quiere ver.
¿Qué es la violencia de género?
En primer lugar, antes de que demos paso a la reflexión sobre los mitos y estereotipos que tienen lugar en la violencia de género, creo que es importante que cada uno se pregunte qué es la violencia de género para después contrastarla con las definiciones que se utilizan tanto en el ámbito psicológico como en el jurídico.
En la Declaración sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer de las Naciones Unidas (1994), la violencia de género es definida como:
«Todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, inclusive las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública o privada».
En palabras de Kofi Annan, séptimo Secretario General de las Naciones Unidas:
“La violencia contra la mujer es quizás la más vergonzosa violación de los derechos humanos. No conoce límites geográficos, culturales o de riquezas. Mientras continúe, no podremos afirmar que hemos realmente avanzado hacia la igualdad, el desarrollo y la paz”.
Violencia de género, lo que no ves
Uno de los grandes problemas que siguen persiguiéndonos año tras año es que aún muchas mujeres y hombres no son conscientes de que la violencia de género o que la violencia no es sólo el daño físico.
A día de hoy muchas personas se siguen preguntando cómo hay mujeres que se mantienen dentro de una relación de este tipo o qué lo que sucede, hablamos de patologías que habrá que trabajar en la consulta pero a nivel social podemos reflexionar juntos, podemos generar cambios juntos comenzando por cada uno de nosotros, ya se sea hombre o mujer.
Esta imagen de Amnistía Internacional nos muestra cuáles son las bases del cultivo de la violencia de género – el micromachismo y el uso de la mujer como objeto en tantas áreas públicas (publicidad, televisión, el humor, etc.) – y cómo todas esas muestras tan visibles al convertirse en algo normativo y bien visto se vuelven invisibles. Todo el mundo se ríe ante un chiste o no se dan cuenta del uso de la mujer en un anuncio sexista, todo ello le quita el valor a las cosas que sucederán después como el desprecio, la desvalorización o la humillación hacia la mujer.
Lo que llega a las noticias y a los medios es cuando la violencia de género ha llegado a su máxime, la muerte de una mujer. Pero, lo mejor que podemos hacer cada uno de nosotros, es reflexionar sobre la imagen y su contenido, intentar cambiar nuestro entorno haciendo ver que lo que vemos día a día necesita ser cambiado para crear y educar en igualdad de derechos, de valores y de personas.
Mitos sobre la violencia de género
A continuación, os compartimos algunos mitos que espero que os sirvan para reflexionar y profundizar realmente sobre esto. A veces, esta educación está tan integrada en uno mismo que ni si quiera se percibe, y es importante deshacerse de esto para tener un pensamiento crítico y propio.
Un hombre jamás maltrata porque sí, responde a una provocación por parte de su mujer
A pesar de que nos encontramos en una sociedad «más avanzada» que en generaciones anteriores y, a pesar de que se están llevando a cabo campañas para desmitificar la violencia de género, ésta es una creencia que está muy arraigada tanto en hombres como en mujeres. Nadie puede comprender que un acto violento no sea la respuesta a un determinado estímulo, a una incitación por parte de su mujer para que el otro pierda el control y la maltrate pero esto no es real.
Los expertos que han trabajado con mujeres maltratadas afirman que éstas llegan a adoptar una vida pasiva y de cierta sumisión ante su pareja para evitar todo tipo de enfrentamiento violento, para que no pueda encontrar en su comportamiento ningún tipo de «falsa» provocación. Pero, lo que nos encontramos, es que para el hombre agresor los propios deseos de su mujer son su máxima provocación, que desee algo más allá de él.
El maltratador está loco
Cuando el maltrato llega al punto máximo que es la muerte de la mujer, siempre salen vecinos o amigos de la pareja en televisión que afirman que no sabían nada y que no se lo habrían imaginado nunca, que él era muy agradable y encantador.
Los estudios muestran que sólo el 5% de los hombres que maltratan a sus mujeres tienen un trastorno mental grave.
La violencia de género sólo se da en los estamentos bajos de la sociedad
Muchos piensan que los maltratadores y las víctimas de violencia de género no tienen estudios, son pobres y viven en la miseria. Nada más lejos de la realidad.
La violencia de género afecta a todos los estamentos de la sociedad, tanto a los ricos como a los más pobres, a la gente con una formación extensa como a aquellos que no tienen estudios básicos. Pero sí hay una diferencia, el tipo de maltrato que se ejerce puede ser diferente y las respuestas para salir del maltrato también, una mujer que está emparejada con un personaje de la alta sociedad con vida pública puede sentirse más presionada para no denunciar o salir de esa situación porque vivirá la crítica y la vergüenza de otra manera.
El maltratador ha sufrido directa o indirectamente maltrato en su infancia
A pesar de que hay estudios que relacionan este tipo de variables, se ha demostrado que no hay una causa efecto a la hora de haber sufrido directamente maltrato en la infancia o indirectamente, cuando uno la ha presenciado.
No todos los hombres que han sufrido maltrato lo reproducen en la vida adulta, pueden estar muy sensibilizados contra este tipo de actitud, por lo que también podemos afirmar que no todos los maltratadores han sido maltratados en su infancia.
Si una mujer no se separa de su maltratador, será que le gusta
Este tipo de razonamientos hace que la mujer deje de considerarse como víctima a que se convierta en su propio verdugo, a considerarla como una persona que disfruta y que busca este tipo de relación como si fuese algo placentero para sí misma. Esto sólo muestra la ignorancia respecto a qué es lo que está sucediendo realmente en esa mujer.
Son muchas las razones que pueden haber para que una mujer se mantenga junto a su maltratador y también dependerá del momento de la relación en la que se encuentren, pero nombramos algunas para que podamos reflexionar sobre ellas:
- En un principio, el hecho de que su pareja la maltrate (una persona con la que tiene una relación amorosa, recalquemos el amor) hace que se preocupe y le justifique porque tiene que haber una razón para que esa persona que la ama la esté agrediendo, seguro que tiene algún problema que podrán enfrentar juntos cuando esté mejor y ella tiene que ayudarle.
- Por amor conseguirá que su pareja cambie. No podemos olvidarnos de que el maltratador suele mostrarse muy arrepentido después de haber cometido la agresión, suplicará perdón, implorará con lágrimas en los ojos y apelará al amor que sienten jurando que nunca más se repetirá y que la necesita para vivir.
- La culpabilidad es un sentimiento que se pone en marcha en seguida. Considerarse así misma como la detonadora del maltrato hace que encuentre una justificación para esa agresión y, en muchos casos, el maltratador se lo hará entender de todas las maneras posibles. «Tú me has hecho esto, tú has hecho que te pegue» o «Tú te lo has buscado».
- El miedo es atronador en una relación de este tipo. Miedo porque no saben qué tipo de pareja será la que despierte hoy a tu lado ¿Cariñosa o violenta?, porque no saben si las dejará marchar o si acabará como esas que salen en televisión, muertas.
No hay violencia de género si no hay lesión física
Por último, hacer hincapié en que hay muchos tipos de violencia de género como mencionábamos en las definiciones, el hecho de no tener un moratón en el cuerpo no implica que una no esté viviendo una situación de maltrato.
Todavía se le resta importancia a las amenazas, a los insultos y a las humillaciones, como si no fueran violencia también. Como si que a uno le priven de libertad para poder decidir cómo vestir, con quién ir (amigos, familia) o a dónde ir, como si a uno le encerrasen en su casa durante días, eso no fuera violencia. Parece que, todavía, aún se le da más importancia al tortazo o a la paliza, cuando ambas dejan una huella muy difícil de borrar en el alma. No olvidemos que el maltrato verbal o psíquico también es violencia.
A los hijos de la víctima no le afecta la violencia
Jamás nos olvidemos de los niños, si una mujer está sufriendo violencia de género sus hijos también. En la mayoría de los casos, la violencia ejercida contra la pareja también se reproduce contra los hijos, es más, como estamos viendo últimamente, los hijos se están convirtiendo en la herramienta para hacer daño, controlar o terminar de destrozar a una madre por dentro.
Los asesinatos por violencia de género son casos aislados
El asesinato es el último paso a una vida de pareja que puede haber estado cargada de todo esto que hemos hablado en el resto de mitos. Los asesinatos por violencia de género no son casos aislados y sólo hay que leer diariamente los periódicos o seguir las noticias televisivas para oír con una terrible frecuencia que una mujer más a muerto a manos de su pareja.
No son casos aislados y, hasta que no nos demos cuenta de que esto es algo de todos, seguiremos por el mismo camino. Hay muchísimo trabajo que realizar, muchísimo. Hoy día ya nos avisan los adolescentes y las nuevas generaciones, las investigaciones nos dicen que hay una escandalosa tolerancia al maltrato, de entender que los celos y la posesión es amor. Hay mucho que desmentir y hay mucho que trabajar por una sociedad más sana, por un amor más sano y por dejar de utilizar a las mujeres como objetos.
Hay mucho más mitos pero creo que estos son un buen comienzo para que esto nos lleve a preguntarnos cuántos estereotipos almacenamos y si conocemos la realidad que se presenta ante nosotros.
Otros artículos que os pueden resultar interesantes:
Si quieres continuar leyendo y reflexionando acerca de la violencia de género, los diferentes estudios realizados o poder pensarte un poco más, te recomendamos estos artículos:
El golpeador es un enfermo y tal vez lo aprendió de pequeño en su casa y la mujer golpeada debe pedir ayuda de inmediato.En fin ambos necesitan ser tratados por profesionales o un grupo de autoayuda,
Saludos.
25 de Nov, día internacional contra la violencia de Género !!
Muchas gracias por esta información que educa y alerta a quienes sufren algún tipo de maltrato.
Desgraciadamente la persona que golpea, es por que lo vio desde su infancia y se le hizo costumbre y para el es natural que esto suceda, por lo que se crea un vinculo entre el golpeador y el golpeado como si fuera esto natural y una forma de vivir, desgraciadamente esto sucede mucho en nuestro Mexico, por la gran perdida de valores y desintegración familiar.
Estoy de acuerdo que donde hay maltrato fisico o psicologico a la mujer, existe grave problema de comportamiento. Pero NOSOTROS LOS HOMBRES TAMBIEN SUFRIMOS MALTRATO PSICOLOGICO cuando y casi siempre la mujer lo ha heredado de una madre abusafora y castradora de su pareja. O cuando la mujer ha sido sometida por su amante a la persuacion coercitiva para que sin escrupulos ella maltrate a su marido. Y mucho mas…
La violencia de género puede venir de ambas partes, eso es indiscutible Jose
Importantísimo el mito de que pueda existir alguna justificación a las conductas de maltrato. Que los profesionales de la psicología podamos trazar el perfil del maltratador e incluso explicar sus conductas, de ningún modo quiere decir que sean justificables. Para la persona que hace un abuso de poder y agrede a otro, es tan fácil disparar su agresividad. Es experto en encontrar estímulos, circunstancias y conductas en los otros que no encajen en sus patrones de pensamiento o esquemas. Siempre encontraría una razón para agredirte, no es cosa tuya, jamás.
La violencia doméstica se ha constituido como un fenómeno invisible durante décadas, siendo una de las manifestaciones más claras de violencia física que surge sin duda como consecuencia directa de una estructura u organización social patriarcal, caracterizada por la dominación del género masculino y la opresión del género femenino. En la actualidad son muchas las mujeres víctimas de la violencia de género. Si necesitas ayuda profesional, visita nuestra página, podemos ayudarte.
Desafortunadamente esto tambien se trata de algo cultural. Originalmente son los hombres son más fuertes y culturalmente se les impone que deben demostar su fortaleza, por lo que para ellos es muy difícil admitir y denunciar que pueda haber maltrato por parte de sus parejas.
Debería haber igual trato para ambos sexos incluso en este sentido. esto también se trata de algo cultural. Originalmente son los hombres son más fuertes y culturalmente se les impone que deben demostrar su fortaleza, por lo que para ellos es muy difícil admitir y denunciar que pueda haber maltrato por parte de sus parejas.
Debería haber igual trato para ambos sexos incluso en este sentido.