Las noticias sobre el mundo laboral no están siendo nada buenas en el inicio del año, al menos en la industria tecnológica. Tecnológicas grandes como Microsoft, Amazon, Salesforce o Zoom han hecho despidos masivos en sus oficinas de todo el mundo. Este es un hecho que, evidentemente, afecta de forma notable a cualquier trabajador pero, ¿cómo se puede hacer frente a esa situación?
Este tipo de despidos es posiblemente una de las situaciones más impactantes a las que un trabajador puede enfrentarse en su carrera profesional. Estar presente en la lista de despidos masivos no es plato de buen gusto que puede generar, y normalmente genera, un estrés incontrolable en la persona implicada por distintas razones: financieras, autoestima, salud mental…
Las personas, por naturaleza, tenemos que sentirnos realizadas con lo que estamos haciendo y las tareas que realizamos. Si esto nos ocurre puede acarrear en una pérdida de autoestima porque se puede pensar que no se es bueno en lo que se estaba haciendo y eso puede generar un sentimiento de inutilidad y vergüenza que no todo el mundo puede soportar de la misma manera.
Al ser algo que está fuera del control del trabajador, la ansiedad por seguir teniendo una estabilidad financiera puede desembocar en distintos problemas de bienestar emocional que pueden llevar incluso a la depresión. Pero este artículo no va de buscar y hacer hincapié en los problemas, sino de buscar soluciones para que la persona afectada pueda pasar página lo más rápido posible.
¿Cómo superar los problemas sufridos por un despido laboral?
Ser despedido no es una situación agradable para nadie. Pero estos consejos harán que la persona afectada pueda recuperarse más rápido y su salud mental vuelva a ser la que era:
Pedir ayuda
Es la primera y fundamental. Lo único que no hay que hacer cuando esto ocurre es encerrarse en uno mismo y no sacar esos sentimientos negativos que se tienen. Hay que buscar apoyo en familiares, amigos e incluso en profesionales para poder expulsar todo lo negativo que se tiene dentro.
Hay que contar cómo se siente, cuáles son esos sentimientos que se tienen tras el suceso. Se tiene que buscar una opinión externa que no solo sirva para desahogo, sino para recibir ayuda. Cuando algo así ocurre, las personas afectadas se encierran en un ambiente de negatividad que puede diferir de la realidad. Esa parálisis que se puede sufrir puede ser mitigada si se habla con gente. Puede que incluso esas personas puedan ayudar a la persona implicada a buscar nuevas oportunidades de empleo.
Establecer nuevas metas y objetivos
Tras unos pocos días de asimilación de lo que acaba de pasar. Es interesante establecer una serie de nuevas metas y objetivos que puedan ayudar al individuo a crear una hoja de ruta. Para esto, crear una línea del tiempo puede resultar muy útil. Esta línea del tiempo puede incluir cosas como:
- Realización de cursos – Aprender nuevas habilidades o mejorar las existentes es algo que se puede hacer cuando se tiene tiempo. Además, no solo es algo muy positivo de cara a buscar un nuevo trabajo ya que los técnicos de selección lo verán, sino que también aumentará la confianza en uno mismo. Hay que saber el tiempo que se destinará en ello y esta técnica lo permite a la perfección.
- Actualización de currículum – Hay que actualizar el cv y la carta de presentación. Cuando se está trabajando es algo que no es necesario mantener muy actualizado, pero si se busca un nuevo empleo es fundamental y además ayudará a la persona a darse cuenta de lo que realmente puede hacer, favoreciendo también su confianza. Agregarla ayudará a conocer los tiempos que se manejan.
- Inicio de búsqueda de trabajo – En la línea del tiempo se tiene que tener en mente cuándo se pretende empezar a buscar trabajo. Puede que se necesiten unos días, semanas o meses para descansar si la situación económica lo permite, pero siempre hay que tener esto en el horizonte.
Se pueden incluir muchas más cosas, pero estas metas y objetivos pueden antojarse fundamentales para que la mente siga estando concentrada en seguir escalando.
Realizar actividades
Hacer actividades que a la persona afectada le gusta hacer es muy recomendable por dos motivos: ayudan a mantener una perspectiva positiva y mejora su estado de ánimo. Puede considerarse una especie de zona de confort en la que se puede recuperar física y emocionalmente.
Tener una rutina saludable ayuda a estar más enfocado y organizado. Entre las mejores para este tipo de situaciones destacan:
- Levantarse temprano – Seguir teniendo una rutina de levantarse temprano hace que se aproveche mejor el día. Ayuda a aumentar la productividad, a tener más energía, a mejorar la salud y, por supuesto, a tener más tiempo para uno mismo.
- Realizar ejercicio – Hacer ejercicio ayuda a sentirse bien física y mentalmente además de las ventajas que todos conocemos de mejorar la salud cardiovascular, aumentar la energía y reducir el estrés.
- Aprender cosas nuevas – Como dijimos, aprender debería ser una tarea a realizar ya, que a priori, se puede contar con más tiempo.
Formar parte de un despido masivo, o ser despedido, no es plato de buen gusto para nadie pero hay una gran cantidad de factores que juegan un papel interesante en cómo puede afectar esto al trabajador. Puede que ser despedido suponga un alivio porque se estaba cerca de un burnout o no se estaba contento, puede que sea algo más serio si se estaba en el trabajo soñado. Sea como fuere, el aspecto psicológico es fundamental y la salud mental tiene que ser cuidada para recuperarse lo antes posible.